Hoy en Piedra de Toque_Onda Vasca viajamos a través de la actualidad internacional. Esta semana observábamos con sorpresa cómo un atentado suicida en el aeropuerto de Moscú acababa con la vida de 38 personas y dejaba más de 130 heridos. Y cómo en Afganistán un soldado del ejército español resultaba herido de bala en un tiroteo en el que fallecieron varios afganos, entre ellos un niño. Así que hoy nos disponemos a viajar de Chechenia a Afganistán y conocer cómo son realmente estos dos países, por qué situación están pasando y cómo es la vida allí al margen de lo que nos llega por los medios.
Unai Aranzadi, periodista, fotógrafo y documentalista, nos guiará por el Caucaso Norte. Hasta allí viajó hacer ahora un año para tomarle el pulso al conflicto checheno que lleva ya más de una década abierto con dos guerras y un millar de muertos. Y queremos viajar hasta allí porque esta semana el atentado tan sólo ha generado en los medios un debate sobre la seguridad rusa, pero nada se ha mencionado de la causa última, la situación humillante en la que vive el pueblo checheno totalmente arrasado por el ejército ruso. Unai nos detallará cuáles son las aspiraciones de este pueblo y qué movimientos existen para no perder la esperanza de un final pacífico.
De Chechenia a Afganistán con Antonio Pampliega. Durante más de dos meses, Antonio ha vivido en diferentes lugares del país tanto empotrado con las tropas estadounidenses en primera línea de batalla como en la retaguardia visitando los principales hospitales del país. Ahora ha publicado “Afganistán. La vida más allá de la batalla” con las crónicas editadas durante esos días. Y es que la principal pretensión de su viaje fue conocer el rostro humano de un país que no conoce la paz y en que todo apunta a que todavía le falta muchas décadas hasta que la saboree.
Kiko Betelu, como cada sábado, será el encargado de proponernos un título de un libro para viajar desde casa y continuar con nuestros tres propósitos para este año: vivir con menos, vivir más abierto a otras realidades, vivir más en contacto con la naturaleza. Las tres piedras de toque de cada sábado.