Comienzo a leer «Vivir sin jefe. Los 50 errores del emprendor». El libro que hará que ames trabajar por tu cuenta. Llevo ya más de siete años viviendo así, espero evitar alguno de los errores. Complicado. Ahora os presento el decálogo de 12 puntos con el que empieza el libro. Declaración de intenciones. Me gusta. Sergio Fernández, sin duda, un buen aliado para todos aquellos que quieran poner en marcha sus propios proyectos. Y es que más vale ir por libre que mal acompañado. Se acabó la época de empleado sumiso. Demasiados jefes malos.

Aquí va la piedra de toque del emprendedor, un modo de entender no sólo el trabajo, sino la vida:

1. Lo primero es lograr la armonía y el equilibro entre las diferentes áreas de la vida. Su vida es como una mesa. Puede tener el tablero y tres patas en perfecto estado, pero como la cuarta pata falle, esa mesa es inútil. Un fallo inutiliza todo el sistema.

2. Ser emprendedor es una manera de entender la vida y de estar en el mundo.

3. La honestidad es un valor. También lo son la integridad, la creatividad y la constancia.

4. Trabajamos para generar el máximo valor para todas las partes implicadas.

5. Todo lo que podría hacerse no se ha hecho. Todo lo que podría inventarse, tampoco.

6. El hecho de que todo el mundo le diga lo mismo sólo significa que todos ellos comparten el mismo punto de vista.

7. Imposible lo vamos a cambiar por ¿cómo podría ser posible?

8. Los problemas son inevitables. Nuestro trabajo es prevenir su aparición y minimizar su impacto. Son un reto y una lección y les estamos agradecidos por darnos la oportunidad de aprender. Lo importante no es si se cae o no. Lo que importa es cuántas veces está dispuesto a levantarse.

9. Si se lo está pensando, hágalo. Fallará el 100 % de las canastas que no lance. ¡Atrévase a equivocarse!

10. Tenemos dos ojos, dos orejas y una sola boca. Yo creo que debe ser por algo.

Decálogo más dos:

11. Decir que «no» de vez en cuando es imprescindible. También lo es tener el coraje para decir que sí cuando es necesario.

12. Una persona que no es capaz de pedir ayuda es alguien que no tiene nada que ofrecer. Qué cierto.