Abrimos una nueva vía de escalada en homenaje a todas aquellas personas que han fallecido de forma anónima disfrutando de lo que más les gustaba, la montaña. Seguimos para eso los pasos del escalador Eneko Aira hasta el valle de Taghia en los altos Atlas marroquíes. De allí acaba de regresar de rendir un homenaje a Beatxi, su compañera de cordada y a quien perdió en 2005 escalando en el Vignemale. Seis años después, Eneko no sólo regresa a la escalada, sino que termina con sus propias manos la vía que Bea dejó a medias. “Beatxi beti gure bihotzetan” es ahora una vía de superación, de cariño y de amistad. 

Tras el accidente el regreso a la pared es muy duro: no comprendes por qué realizas una actividad en el que puedes llegar a perder tanto. En un arranque de coraje, decidí continuar con el apoyo de toda mi gente y hacerlo para escalar mejor que nunca”

Todo comenzó en una conversación entre Eneko Aira y la escritora y montañera Eider Elizagi: la idea de rendir un homenaje a Bea con una vía nueva. “Todos los años realizaba un pequeño homenaje pero notaba que todavía quedaba algo para mantener viva su memoria”. Dicho y hecho. Tras un año de preparativos, Eneko decide abrirle vía de escalada donde nunca antes haya escalado nadie en pleno corazón de los Atlas.

Dibujando la nueva vía. Eider Elizegi

El proyecto nació ligado a una pared que fotografiamos durante un viaje en 2008 por la zona de Taghia en los Atlas. Después recopilamos toda la información que pudimos hasta encontrarnos frente a frente de nuevo con la pared”.

Pero ganó la pared el primer pulso. La inaccesibilidad a la montaña impedía montar allí el campamento. “No podía castigar así a los amigos que me acompañaban. El pueblo más cercano con agua estaba a seis horas”. Lo que no sabía la pared era con quiénes trataba (Jordi, Eider, Katu, Alba, Eneko…) más todos los que apoyaban, apoyábamos, desde la distancia. En menos de un día, ya habían localizado un nuevo pilar: “En cuanto lo vimos nos cautivó”. Allí cerró Eneko su herida y dejó para siempre viva la memoria de Beatxi junto a la de todas aquellas personas que de forma anónima pierden su vida realizando lo que más les gusta: vivir la montaña. Escucha el podcast y emprende este viaje de superación, carió y amistad.

Autora de las dos primeras fotografías Eider Elizegi.