Sri Lanka ha sido para mí la puerta a Asia. Durante 10 días he podido recorrer la isla y descubrir sus playas salvajes, parques naturales y templos budistas, hinduistas, mezquitas y católicos. Me he despeinado en la costa, helado en la niebla y gritado a lomos de un elefante. También he llorado con el picante que amenaza con explotar en cada comida. Y he disfrutado muchísimo con la cámara y con el cuaderno de acuarelas, como ahora comparto con todos: ocho acuarelas para ocho paisajes del país que me ha abierto las puertas a un continente nuevo y que sin duda seguiré recorriendo, Asia.
A lo largo de los próximos meses iré editando el material del viaje, ahora comparto con todos estas acuarelas que de forma autodidacta he realizado en mi cuaderno de viaje. Cómo veis, aparece la playa de Negombo al atardecer, el faro de Galle sitiado p0r sus murallas, un elefante en la carretera al Parque Natural de Yala, una laguna antes de entrar al Parque para ver a golpe de adrenalina más animales, las estupas de Dambulla, los eternos paisajes de Ella, las plantaciones de té de Nuwara Eliya, cómo no, la gran roca: Sigiriya.
Nos ha encantado Sri Lanka. A ver qué os sugiere a vosotros.